Los Reyes Magos caminaron Areco

Para cumplir con una vieja costumbre vinculada a lo religioso pero con un fuerte anclaje social y cultural, Omar Beto Rivero, Sergio Sánchez y Ramiro Errico se vistieron de reyes magos y repartieron caramelos a los niños y niñas del pueblo.
Esta vez Melchor, Gaspar y Baltazar en su noble versión arequera, por iniciativa de Rivero que nos contó que hace esto cada enero desde las épocas que Tito Domínguez era Intendente, partieron desde la esquina de Moreno y General Paz y desde ese punto de encuentro caminaron hacia la Avenida Guiraldes, el corazón del viejo barrio de las Tropas, para llevarle una pequeña alegría a los niños y niñas de una de las zonas más populares de San Antonio de Areco.
“Me acuerdo que empecé con esto en la época de Tito Domínguez, así que mirá si hace años, cerca de 40. En ese tiempo nos vestíamos de reyes magos con la ropa de los curas y tengo un cuadro que si lo ven somos reyes – reyes. En esos momentos me acompañaban Oscar Torres, Luis Molina, Juancito Tamborelli, unos cuantos amigos y algunos que ya no están con nosotros”, recordó Omar Rivero, que agregó: “Esto es para los chicos porque a mí me gusta estar con ellos, que se rían un poco, que pasen un buen rato. Antes yo pedía juguetes, los reparaba y los repartíamos para los chicos del barrio de las tropas, pero ahora no hay plata como dice Milei y nos tenemos que conformar nada más que con caramelos”.
“Tengo 86 años y todavía ando con ganas de vestirme de rey mago y de hacer muchas otras cosas, pero a veces no se puede. Siempre me gustó movilizar mi barrio, ayudar, mirá, cuando se pusieron las luces nuevas en la calle Moreno, colocaron dos cuadras de columnas, hicimos una fiesta con los vecinos y trajimos a Grupo Esmeralda para que tocara. Te estoy hablando de hace más de 20 años atrás para que te des una idea de lo que me gusta preocuparme por el barrio, para que esté limpio y cuidado”, reflexionó Beto Rivero, que hace muchos años que vive en la calle Moreno entre General Paz y San Martín y que cada 6 de enero trata de mantener viva la ilusión de los niños y niñas que aún creen en los reyes magos.